Las desigualdades determinan la salud de los mayores
Fuente: NCYT 24 diciembre 2019/UPV/EHU Gaceta Sanitaria org(licencia CC) Unai Martin Roncero
Investigadores de la UPV/EHU, Osakidetza y Departamento de Salud (España) han revisado artículos científicos que analizaban la relación entre las desigualdades socioeconómicas y la salud de la población mayor en España. Los resultados del estudio son de utilidad para desarrollar futuros estudios y diseñar políticas sanitarias específicas destinadas a disminuir estas desigualdades en salud. Los aspectos que más han destacado son el nivel de estudios, las características del lugar de residencia y la ocupación anterior de las personas.
El Grupo de Investigación en Determinantes Sociales de la Salud y Cambio Demográfico, OPIK, de la UPV/EHU es un grupo multidisciplinar del campo de las ciencias sociales y de la salud, que se dedica, entre otros, a la investigación de los factores sociales que influyen sobre la salud y la enfermedad de la población, las desigualdades sociales en salud y las políticas que pueden modificar tales determinantes sociales para la mejora de la salud poblacional. El estudio de las desigualdades socioeconómicas en el ámbito español es un tema de creciente interés, pero la mayor parte de los estudios hacen referencia a la población general. A pesar de la existencia de revisiones de ámbito internacional y de estudios europeos que apuntan a estas desigualdades en población mayor en diferentes indicadores de salud, son escasas las revisiones sobre este grupo de población en España.
En un estudio llevado a cabo en colaboración con Osakidetza, el Instituto de Investigación Sanitaria Biodonostia y el Departamento de Salud del Gobierno Vasco se ha realizado una revisión de diversas investigaciones relacionadas con las desigualdades socioeconómicas en salud en población mayor de 65 años en España, con el fin de “ver qué tipo de indicadores se pueden utilizar en este caso y ver lo que se ha hecho en otros contextos”, explica el doctor en sociología de la UPV/EHU Unai Martín, uno de los autores del trabajo.
Como conclusión del estudio, los investigadores afirman que existen desigualdades socioeconómicas en salud entre la población mayor y que su magnitud varía según el sexo en algunos indicadores de salud. De hecho se han detectado desigualdades socioeconómicas en todos los indicadores de salud analizados: estado funcional, morbilidad, salud percibida, salud mental y emocional, estado cognitivo, calidad de vida, mortalidad y esperanza de vida. El nivel educativo y los índices ecológicos han sido los indicadores que más desigualdades en salud han reflejado. Martín añade, por otra parte, que “también la ocupación que haya tenido una persona en toda su vida parece marcar el estado de salud; no solo por las características del trabajo que tuvo, sino también por las condiciones de vida que da tener un trabajo u otro”. Otro dato que destacan en el estudio es que las mujeres mayores tienen mayor esperanza de vida pero peor estado de salud. El estudio concluye, asimismo, que un mayor nivel educativo y el mantenimiento de unas pensiones suficientes pueden ser políticas clave que contribuyan a la disminución de las desigualdades en este grupo de población.
Conocer en profundidad las desigualdades socioeconómicas en salud de la población mayor es un paso previo indispensable para diseñar intervenciones y estrategias adecuadas que ayuden a disminuirlas. En opinión de Martín, “las variables socioeconómicas son muy importantes para entender la salud de las personas. Nuestra salud no sólo depende de nuestra genética y del sistema sanitario, sino que las condiciones de vida son muy importantes para tener una mejor salud, un envejecimiento más saludable y una mayor esperanza de vida. A veces creemos que con tener un sistema sanitario universal ya estamos haciendo que todo el mundo pueda tener una mejor salud, pero la salud no solo se cuida con políticas sanitarias, sino también con políticas urbanas, de empleo, etc.”.
La investigación ha sido llevada a cabo por el doctor en sociología Unai Martín Roncero y la doctora en salud pública Isabel Mosquera Metcalfe del Departamento de Sociología 2 de la UPV/EHU, así como por la bióloga Mónica Machón Sobrado y la doctora en medicina Itziar Vergara Mitxeltorena, del Instituto de Investigación Sanitaria Biodonostia, y por la socióloga Isabel Larrañaga Padilla del Departamento de Salud del Gobierno Vasco.